jueves, 8 de octubre de 2009

1..MOVIDA DE PISO../..2..LEY DE MEDIOS../..3..LA ÚLTIMA PALABRA..

1..Kirchner mueve el piso opositor

Mauricio Maronna / La Capital - mmaronna@lacapital.com.ar

Después del 28 de junio a Kirchner & Kirchner les quedó un auto desvencijado, con los vidrios rotos, las llantas recapadas y la sensación de que pronto, muy pronto, el cascajo (como les dicen en los pueblos) no arrancaría más. Pero sucedió todo lo contrario. A caballo de jugar a todo o nada y con una oposición flácida, el ex presidente convirtió al esperpento en un bólido.

No se anduvo con chiquitas la Casa Rosada: estatizó el fútbol merced a un acuerdo con Julio Grondona (todo lo contrario a lo que pregona de la boca para afuera el gobierno, con Don Julio y sus casi 30 años en el poder).

Aunque nadie sabe cuánto pierde el gobierno con las transmisiones de los partidos, le sirvió para que Canal 7 tenga un rating pocas veces alcanzado, cuestión que el Ejecutivo aprovecha para saturar la pantalla con publicidades tan horrendas como directas. Pero poco tienen aquí para quejarse los “privados”, que también saturan la pantalla adjudicándole a la futura ley de medios la intención de hacerlos desaparecer.

La pelea no terminará esta semana cuando se apruebe el proyecto en el Senado, apenas será el inicio de una nueva escalada de contrapuntos que seguirá una vez que el Congreso cambie su composición.

Cuenta Kirchner con algunos beneficios a su favor de los que careció con el mítico voto no positivo de Julio Cobos. No hay (ni mucho menos) una sociedad movilizada contra el proyecto y además de los aliados tradicionales, otros partidos, como el Socialista, votará a favor de la iniciativa escudándose en sus “convicciones”.

Resulta cuanto menos curioso que a la hora de oponerse a un par de artículos el PS utilice una batería discursiva que haría pensar otra actitud a la hora del voto en general. Pero no se quedará en esto Kirchner, quien dispone de horas libres y de una capacidad de daño que nadie debería subestimar.

En Olivos ya están craneando una nueva ley electoral a gusto y paladar del kirchnerismo. Será la nueva cuestión de tapa a menos que los piquetes, los despidos y la precaria situación laboral obliguen al gobierno a ocuparse de lo urgente.

La redacción de la iniciativa de reforma política comenzaría en pocos días. Se intentará impulsar un sistema de internas abiertas e indirectas como en Estados Unidos. En cada provincia se designarían congresales que definirían finalmente al presidenciable.

Alberto y Adolfo Rodríguez Saá ya se manifestaron a favor de las primarias escalonadas por regiones al estilo estadounidense, aunque ambos saben que es la única metodología que le permitirá a Néstor Kirchner intentar volver a ser candidato presidencial.

El santacruceño todo lo hace pensando en la provincia de Buenos Aires (pese a haber sido derrotado el 28 de junio).

El propio director nacional electoral, Alejandro Di Tullio, estuvo en Santa Fe cuando se realizaron las primarias. Una manera de ir preparando las bases para lo que vendrá. “El Flaco (por Kirchner) sigue convencido de que Carlos Reutemann será el rival a vencer porque alineará al peronismo disidente, tendrá a Eduardo Duhalde armándole la provincia de Buenos Aires y estará apoyado por las “viudas” de la ley de medios. El problema del Lole (y Kirchner lo sabe) es su escasa voluntad de pelear en internas. Por eso le vamos a meter internas obligatorias”, desliza a este diario un kirchnerista convencido de que el ex gobernador no se bancará fuego cruzado y acusaciones como las que se utilizaron contra Mauricio Macri por “noventista”.

Casualmente (o no), el titular de Nueva Mayoría, Rosendo Fraga, coincide en líneas generales con la fuente. “Kirchner enfrenta un cuadro cada vez más difícil tanto en lo político como en lo sectorial, pero sigue teniendo a su favor alinear una minoría decidida. Mientras el ala izquierda de sus partidarios sigue anunciando su reelección para 2011, retoma su presencia en el conurbano. Para impedir que Reutemann pueda ganarle la interna, intenta avanzar con las primarias abiertas y simultáneas, pero indirectas. La división del voto peronista y el de la oposición no peronista es la clave en la estrategia oficialista para la próxima elección”, razona el prestigioso analista.

Kirchner no descansa y (como alguien dijo) les gana la falta envido con un cuatro a los opositores, un racimo de voluntades que a veces no sabe lo que quiere ni tiene mensurada la capacidad extraordinaria del sureño para hacer política minuto a minuto.

Por suerte reapareció Elisa Carrió, quien más allá de sus vaivenes anímicos es la voz más contundente que tienen los anti K. Lilita deberá cambiar ciertas actitudes que, en vez de sumarle a su espacio, le agregan masa crítica al oficialismo, como el caso del saltimbanqui Carlos Raimundi, un ejemplo entre tantos, que llegó a ser diputado escondido bajo la pollera de la chaqueña y es hoy uno de los principales conversos.

Pero la voz de Lilita se ha hecho extrañar ante el candor de una oposición que le pone la otra mejilla a Kirchner pese a que el ex presidente sólo le devuelve sopapos. Electoralmente, el kirchnerismo no recupera altitud y su suerte está echada. Pero los dos años que le restan en el poder pueden ser suficientes para generar sorpresas.

“¿Qué van a hacer los socialistas en el 2011? ¿Van a ser funcionales a Reutemann o se vienen con nosotros?”, le preguntó a un diputado que no quiso decirle la verdad: Hermes Binner buscará negociar un acuerdo con Cobos poniendo como condición que la Gobernación siga en manos de un socialista.

Pero el PS no descuidará la relación con los K y levantará la mano sin ponerse colorado



Fuente: Tribuna Ciudadana


Enviado por: Alejandro Tourlouruou
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Por: Carlos Tórtora

2..LEY DE MEDIOS


La Banelco del gobierno incluye todo tipo de ofertas a los senadores

La inminente votación de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual en el Senado encuentra a los dos bandos en pugna en un virtual empate, lo que evoca la imagen del debate por la resolución 125, con Julio Cobos desempatando. La desesperación oficial por asegurarse aunque sea un voto más se tradujo en los últimos días en todo tipo de maniobras persuasivas y disuasivas. Juan Carlos Mazzón y Miguel Ángel Pichetto llevan adelante las operaciones sobre los senadores, repasando varias veces por día cómo evoluciona cada uno, para evitar sorpresas, en tanto que Néstor Kirchner recibe al menos dos informes diarios. Es que, más allá de cuánto y cómo pueda aplicarse la ley, que será con seguridad cuestionada ante la justicia, lo cierto es que la suerte política del gobierno se juega en esta votación. Una derrota podría ser la señal de partida para la diáspora de la tropa kirchnerista, que está unida por los triunfos de su general, pero duda sobre la posibilidad de ganar la guerra.

El bazar de los votos.
La lista de ofrecimientos que los operadores presidenciales les hacen a los senadores dudosos es de lo más variada. A la justicialista mendocina Mónica Troadello -cuyo mandato termina el próximo 10 de diciembre- le habrían ofrecido la Subsecretaría de Recursos Hídricos de la Nación y aparentemente habría aceptado. Otro saliente es el tucumano Julio Miranda (PJ), que tiene la particularidad de estar jaqueado por procesos penales originados en su gestión como gobernador. Aparte de protección judicial, Miranda recibiría apoyo político para continuar como vicepresidente de la Obra Social del Sindicato de Petroleros Privados. Guillermo Jenefes, Presidente de la Comisión de Sistemas y Medios de Comunicación y Libertad de Expresión, es un caso muy especial. Su disidencia sobre el artículo 161 del proyecto, que establece un plazo de un año para desinvertir, mantuvo electrizado al gobierno durante dos semanas. Finalmente aceptó firmar el dictamen de comisión que posibilita el tratamiento del proyecto en el recinto. Jenefes, con dos de sus hermanos, es propietario del multimedios jujeño Radiovisión, que integran la FM 97.7, las AM Perico y Libertador, Canal 7 y 15 repetidoras. Según indica la información que circula, le habrían ofrecido que, a través de la letra chica de una futura reglamentación de la ley, su multimedios quedaría fuera de todo riesgo y no tendría que desinvertir.



A Teresa Quintela, senadora riojana y hermana del intendente de la Rioja, Ricardo Quintela, le habrían arrimado una propuesta difícil de resistir. Un crédito de 100 millones de pesos para aquel municipio, con el manejo discrecional de las obras de infraestructura que se realicen.
El shopping oficial también alcanza al gobernador neuquino Jorge Sapag, para que garantice el voto del senador Horacio Lores, del Movimiento Popular Neuquino. Sapag tal vez pronto vea hecho realidad su sueño de construir el camino de los 7 lagos con financiamiento del Estado Nacional.



Por su parte, el gobernador sanjuanino, José Luis Gioja, habría recibido muy recientemente el financiamiento de la Casa Rosada para realizar las inversiones en materia de protección del medio ambiente. De este modo, Gioja esquivaría las numerosas denuncias que tiene por la contaminación de las explotaciones mineras del grupo Barrick.


El pampeano Rubén Marín ya estaría en deuda con Kirchner, porque éste habría intervenido un mes atrás para que Carlos Verna aceptara que aquél se haga cargo de la conducción del justicialismo provincial.


En Chubut, los esfuerzos oficiales apuntan a asegurarse el voto de Marcelo Guinle, esquivo a los deseos de Olivos. Mazzón le estaría asegurando que puede ser el sucesor de Mario Das Neves. “La gobernación es tuya o de Yahuar”, sería la propuesta. Es decir que, de no aceptar Guinle, el kirchnerismo apoyaría a Norberto Yahuar, el ex ministro coordinador que acaba de renunciar y distanciarse de Das Neves. A este último, la operación de Mazzón no le causaría gracia, porque pretende que su sucesor sea Jorge Haidar.


La catarata de ofertas que estaría volcándose sobre los senadores contiene temas ríspidos. Por ejemplo, Olivos ya se habría comprometido con la gobernadora fueguina Fabiana Ríos para que los dos senadores (ex ARI) María Rosa Díaz y José Martínez sancionen la ley de medios, a cambio de la Ley de Promoción de Terminales Electrónicas, más conocida como impuestazo tecnológico, que ya fue aprobada -con escándalo incluido- en Diputados. Llamada también “ley BGH”, el proyecto provocará un aumento general del 30% en los artículos tecnológicos, mediante el incremento del IVA, para favorecer a un grupo selecto de empresas radicadas en la isla. El caso es que los fueguinos se habrían plantado y exigirían cobrar por anticipado, porque dirían que tuvieron malas experiencias anteriores. El impuestazo se debería aprobar entonces antes de la ley de medios, lo que no es fácil. Ni elegante.


Como al mejor cazador se le escapa la liebre, uno de los votos que el kirchnerismo consideraba asegurado estaría ahora en duda. Se trata del de Elena Corregido, la senadora chaqueña. Ocurre que el estallido del matrimonio de Jorge Capitanich y Sandra Mendoza se vino a colar en la ley de medios. Sandra, ahora diputada nacional electa, estaría dispuesta a todo para vengarse de Jorge y Corregido es su íntima amiga. La interna conyugal podría derivar ahora en que Corregido vote en contra.


En el día a día del bazar de los votos, seguramente antes de la votación habrá nuevas ofertas.


FUENTE: INFORMADORPUBLICO.COM
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3..LA ÚLTIMA PALABRA

Por: Carlos Tórtora

La Corte Suprema tendrá la última palabra sobre la ley de medios

Además de Rodríguez Saá,
Macri podría impugnar la norma ante ese tribunal.

De obtener el gobierno la sanción de la Ley de Servicios Audiovisuales de Comunicación, se producirá la inmediata judicialización del conflicto. Por las características del problema, la última palabra la tendrá la Corte Suprema de Justicia.



Según trascendió en el entorno del CEO de Clarín Héctor Magnetto, una vez que la ley se publique en el Boletín Oficial, se iniciaría la presentación de numerosos pedidos de medidas cautelares de no innovar en juzgados contencioso-administrativos federales de muchas provincias. El argumento central seria la violación de los derechos adquiridos que presupone el artículo 161 del proyecto, que obliga a desinvertir en el plazo de un año, en relación a licencias plenamente vigentes. Obviamente, este plazo define en sí mismo como se dará el conflicto: Kirchner tratara de que la justicia funcione lentamente para aplicar la ley y Clarín todo lo contrario. Comparando con la política seguida en la materia por Hugo Chávez, este fue sin duda más respetuoso de la seguridad jurídica que el kirchnerismo, porque solo expropio medios de comunicación cuyas licencias ya estaban vencidas, pero no afecto los derechos adquiridos. Así es que las medidas de no innovar que se presenten llegarían pronto a la Cámara Nacional en lo Contencioso Administrativo ya sea por apelación de Clarín o del Gobierno. Pero como estamos hablando de cuestiones que involucran derechos constitucionales, lo resuelto en Cámara seria recurrible ante la Corte Suprema por vía de recursos extraordinarios. Así es que el alto tribunal tendrá, sin duda alguna, la última palabra en este tema.


La competencia originaria
El segundo camino hacia la Corte Suprema es más directo. Lo anunció el gobernador de San Luis Alberto Rodríguez Saá al anunciar que su provincia se presentara reclamando porque la futura ley viola el artículo 32 de la Constitución Nacional que le prohíbe al Congreso restringir la libertad de prensa mediante la extensión de la jurisdicción federal. En otras palabras que el proyecto del gobierno avasallaría los derechos de las provincias en materia de regulación de los medios de comunicación. La diferencia con los procedimientos comunes es que, en este caso, la competencia de la Corte es originaria, o sea que podrá intervenir ni bien San Luis presente su reclamo.



La operación de Rodríguez Saá, en la que están trabajando cinco juristas, se complementaria con otra que estarían intentando en estas horas los principales operadores de Clarín. Se trataría de convencer a Mauricio Macri para que imite a los puntanos pero con algunas ventajas para este. Tanto Clarín como la mayor parte de los multimedios que serán afectados por la ley tienen sus domicilios en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Esto le daría argumentos al macrismo para plantear que está en juego la jurisdicción de la Ciudad y que, en todo caso, habría que avanzar hacia una ley de medios porteña, tema que ya se planteo días atrás. El plan incluye el llamado a una sesión especial de la Legislatura para que se vote una declaración oponiéndose a la injerencia indebida del Congreso Nacional en las competencias locales.


Obviamente, si Macri se decide a presentarse ante la Corte para cuestionarlo a Kirchner, sin duda alguna se estaría posicionando como candidato presidencial.


El by pass jurídico de los puntanos -y tal vez del macrismo- podría colocar el expediente de la ley de medios en manos de los ministros de la Corte antes de fin de mes.


Este terreno es pantanoso para la Casa Rosada. El alto tribunal siempre cuida de no aparecer como un apéndice de aquella. Carlos Fayt ya se pronunció adversamente al proyecto oficial. Se sabe también que Juan Carlos Maqueda y Enrique Petracchi, los ministros más políticos, son en privado muy críticos de toda esta cuestión. Los dos jueces ideológicamente afines al gobierno, Carmen Argibay y Raúl Zaffaroni, gustan mostrarse independientes y cultivan excelentes relaciones con Clarín. La opinión de Elena Highton de Nolasco es una incógnita. Y así llegamos al presidente de la Corte, Ricardo Lorenzetti, un amante de las soluciones equilibradas. En los últimos meses aquel viene desarrollando una intensa actividad de contactos con sectores empresarios y políticos, con un discurso en el que subraya el vacio de liderazgos políticos y la necesidad de asumir responsabilidad. Como comentan algunos de sus allegados, a Lorenzetti empezaría a interesarle la política y tal vez asumir un rol de contrapeso al creciente autoritarismo oficial. El litigio por la ley de medios podría dejarle servida en bandeja la ocasión de pasar a la historia como el juez que le puso frenos a los excesos del poder político.


Un fallo que le diera la razón a Rodríguez Saá declarando que la ley avasalla las competencias provinciales sería casi un certificado de defunción para esta última.


El triunfo de Kirchner podría entonces trocarse en pesadilla.

FUENTE: INFORMADORPUBLICO.COM

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